Las personas que necesitan o han recibido un trasplante hepático tienen más probabilidades de ponerse muy enfermos si contraen la COVID-19.
Los candidatos a trasplante hepático deben recibir la vacunación frente a la COVID-19 antes del trasplante, siempre que sea posible, para tratar de lograr una respuesta inmunitaria adecuada.
Las personas que han recibido el trasplante hepático y están tomando medicamentos anti-rechazo pueden y además deben ser vacunados frente la COVID-19.
No es recomendable suspender la terapia inmunosupresora antes o después de la administración de la vacuna frente a la COVID-19.